¿Quieres suelos impecables sin tanto esfuerzo? Aprende a limpiar cualquier tipo de suelo sin dañarlo con estos consejos.
¿Quieres suelos impecables sin tanto esfuerzo? Aprende a limpiar cualquier tipo de suelo sin dañarlo con estos consejos.
Mantener los suelos impecables no tiene por qué ser una tarea agotadora, el secreto no es fregar más fuerte o con productos químicos abrasivos, sino en usar los elementos y herramientas adecuadas, que permiten limpiar cada superficie de forma rápida y sin complicaciones. A continuación te damos algunos consejos para limpiar diferentes tipos de suelos, garantizando su durabilidad por más tiempo.
Antes de comenzar a fregar, un par de minutos de preparación pueden ahorrar tiempo y evitar que el proceso de limpieza se haga más complicado.
Suelen ser suelos muy resistentes, pero el exceso de agua sí puede llegar a dañarlos. Lo mejor es barrer bien antes de fregar y usar una cubeta con exprimidor para mantener el trapeador apenas húmero, así se evita la acumulación de agua y se mantiene la superficie en perfecto estado.
Para este tipo lo ideal es tener un limpiador específico para madera o un detergente neutro, para no dañarlos. Con el trapeador, ya sea mop o fregona, se escurre lo más que se pueda porque el exceso de agua daña la madera, el objetivo es que al limpiar el suelo pueda secarse casi de inmediato. Como tip, para un brillo extra, puedes aplicar una cera o un producto especializado después de que el suelo esté completamente seco.
Para este tipo se requiere una mopa escurrida, un cepillo de cerdas duras, un detergente suave y un limpia juntas. El mayor problema de este suelo son las juntas, en donde la suciedad puede incrustarse, por lo que al fregar lo mejor es tallar entre las juntas para quitar cualquier resto que puede quedarse atrapado.
El mármol es sensible a los ácidos, por lo que no se debe usar por ningún motivo productos agresivos o vinagre, lo mejor es usar un limpiador con pH neutro. Al igual que con la madera, se usa un trapeador bien escurrido y se seca el suelo de inmediato para evitar manchas.
Una cubeta con exprimidor permite escurrir la mopa o fregona a la perfección, sin necesidad de agacharte o usar las manos. Al usar solo la humedad necesaria, los suelos se secan en menos tiempo, lo que permite terminar más rápido y evitar accidentes por resbalones y caídas.
Elige la herramienta correcta, adapta tu técnica a cada suelo y verás como el proceso de limpieza se vuelve más rápido. Consulta nuestras opciones aquí.